Biodescodificación: las emociones en la caída del pelo
Para quién está escrito este artículo
Quiero contarte eso primero, porque hay varias maneras en que puede darse la caída de pelo. En este artículo me voy a referir en particular a dos casos:
Caso N° 1. Hombres y mujeres con alopecia areata y caída de pelo por "estrés". Con frecuencia se manifiesta como uno o varios parches en la cabeza en donde no hay pelo. Éste es quizá el caso en que es más evidente la influencia de las emociones. Posiblemente puedes identificar con bastante precisión el estrés que te genera la caída de pelo. Pero no sabes cómo lidiar con eso, estás buscando alternativas, y eso te ha traído hasta acá. Si es así, bienvenido.
Caso N° 2. Hombres y mujeres con alopecia androgénica. Esta es la forma más común de caída de pelo. Se presenta de manera diferente para hombres y mujeres.
En los hombres la línea de entrada del pelo va retrocediendo a los lados de la frente (entradas) y en la zona de la coronilla, hasta quedar sin pelo.
En las mujeres, en cambio, la caída de pelo es difusa, el pelo se adelgaza y reduce su densidad, pero rara vez quedan zonas totalmente descubiertas. Otra manera en que se evidencia es en que se marca la pérdida de pelo en la línea media de la cabeza.
Es bastante inusual que se asocie a este tipo de caída de pelo una influencia emocional, porque es mucho menos evidente. Y al mismo tiempo, ignorar este aspecto es desaprovechar la oportunidad que nos ofrece de sanar, tanto en el aspecto emocional como en la caída de pelo en sí misma.
Así que si tienes alopecia androgénica y estás dispuesto a trabajar el aspecto emocional que tenga en ti (aunque no sepas todavía cual es), bienvenido.
¿Y qué pasa si mi caso no es ninguno de los dos anteriores? Existen otras formas de caída de pelo más allá de lo que aquí describo, que también tienen origen emocional, pero que ocurren mucho menos. Tal vez escriba de ellas con más detalle en el futuro.
Las dificultades emocionales de la caída de pelo
El pelo cubre la cabeza, y en este sentido, las dificultades emocionales de la caída del pelo están muy ligadas a la simbología de la cabeza. Esto depende de cada persona, pero a modo general podemos resumir más o menos así:
- El estrés del desarrollo intelectual, el pensamiento, la inteligencia, o las ideas. Todo el "desarrollo intelectual" ocurre en nuestra cabeza, y muchas veces el estrés viene porque necesitas más. "Necesito rendir más" es lo que escucho más frecuentemente en consulta: necesito ser más productivo, más inteligente, estudiar más, sacarme mejores calificaciones, ser el mejor en el trabajo, etc. Y el problema es que nunca es suficiente. Sin importar cuanto te esfuerces, sientes que necesitas más. Y por supuesto, esto lleva al estrés constante y al sufrimiento.
- Lo que los otros ven de mí, que yo no veo, y que me hace sentir vulnerable, desprotegido. Esto es particularmente frecuente en personas hombres con alopecia en la coronilla.
- La relación difícil con la "cabeza". Cuando en un grupo de personas hay un líder, metafóricamente nos referimos a él como "la cabeza" del grupo, o quien lo "encabeza". A veces, la caída del pelo está vinculada a esta relación difícil con quien sea "la cabeza" a quien tengo que rendir cuentas. Puede ser un jefe, un superior, un profesor, papá o mamá. La experiencia de un papá distante y exigente es una de las que más escucho en consulta.
- La necesidad de reconocimiento. Todos tenemos esa intrínseca necesidad de que papá y mamá nos miren con aprobación en relación a lo que hacemos. Y a veces esa aprobación, ese reconocimiento, no llega, o no es como lo esperamos. Incluso podemos recibir lo opuesto, es decir, menosprecio. Y a veces, la caída de pelo está relacionada con la dificultad de no recibir ese reconocimiento.
- La dificultad intelectual en relación a mi sexo. Por ejemplo, sentir que si no tengo determinados atributos intelectuales no soy aceptable como hombre o como mujer. O sentir que necesito ciertos atributos intelectuales para ser atractivo/a para el sexo opuesto.
- La necesidad de caricias en la cabeza, que nunca llegan. Aquí, el sentido de que se caiga el pelo es de quitar cualquier cosa que pueda impedir que ese cariño llegue.
Es importante notar que estas experiencias no son excluyentes entre sí. Puedes vivir una relación difícil con papá porque sea exigente y, al mismo tiempo, echar en falta recibir de él esas caricias agradables en la cabeza.
La diferencia en las emociones de la caída de pelo común (alopecia androgénica), y la alopecia areata
Hay varias diferencias sutiles entre ambas, pero lo que sobresale usualmente es su temporalidad:
- En la alopecia areata generalmente puedes identificar los eventos difíciles, que son puntuales
- En la alopecia androgénica, la experiencia se vive de manera mucho más sutil, pero constante en el tiempo.
La biodescodificación como camino para sanar
Tal vez mientras lees este artículo te identificas con algunas de las dificultades de la alopecia. Te preguntas si puedes hacer algo, y tal vez en tu interior hay una vocecita que dice "pero yo soy así, he sido así toda mi vida", o también "no puedo cambiar eso, no depende de mí, es mi jefe / papá / pareja / etc".
Justamente esa es la razón por la cual casi no se conversa acerca del componente emocional de la caída de pelo. Porque es, de cierta manera, una manera que tenemos de vivir las cosas, y a veces llegamos a creer que "somos así".
Nada más lejos de la realidad. No es que seas así, sino que
aprendiste a serlo. Y este es un aprendizaje emocional. Lo extraordinario de esto es que puedes cambiar este aprendizaje con las herramientas adecuadas. Y una terapia que está específicamente diseñada para lograr esto es la biodescodificación.
Con esta terapia te puedo acompañar a encontrar este aprendizaje y transformarlo, de modo que ya no sea algo que te haga sufrir. Cuando te liberas de ese sufrimiento, tu cuerpo es libre de sanar.
Puedes saber más acerca de cómo funciona esta terapia y agendar una hora de atención conmigo
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Si ya has probado otras cosas y no te han funcionado, ¿por qué no pruebas con esto? Realmente no pierdes nada con intentarlo.
Espero verte pronto 😉️
Acerca de mí

Mi nombre es
Simón Stuardo. Soy terapeuta en biodescodificación de la escuela de Christian Fleche. También soy Ingeniero Civil Industrial de la Universidad de Chile.
Hace unos 20 años, cuando inicié mi proceso de desarrollo personal pensaba que la mayoría de las cosas de mi no se podían cambiar. En particular, yo era tímido, inseguro y depresivo. Con el tiempo fui descubriendo que en realidad todo eso se puede cambiar con trabajo personal. Y me preguntaba cuál era el límite de todo lo que se puede lograr.
Hoy trabajo en la frontera de la transformación personal:
la sanación emocional y física de las personas a través de la biodescodificación, acompañándolas como terapeuta desde 2018.
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